Fotovoltaica sobre tejado urbano
Instalación solar fotovoltaica conectada a red de 10 kW, situada sobre tejado urbano de un centro de rehabilitación y ortopedia en el municipio de Agramunt , Lleida
Se trata de una instalación de 10,320 kW de potencia, compuesta por 48 placas de 215 kWp, que ocupan una superficie de 135 m2 . Para esta instalación se colocaron un total de 3 inversores de 3 kW. La instalación es capaz de producir 15.155 kW/h anuales.
Hasta hace no mucho, las instalaciones fotovoltaicas se situaban más frecuentemente en las denominadas huertas solares, situadas en el entorno rural. Pero debido a un cambio en la legislación, el gobierno fomenta ahora más la instalación de la fotovoltaica sobre tejados, que normalmente son industriales, pero que también pueden ser bloques de vecinos o particulares que deciden darle una utilidad a su tejado asegurándose una renta durante los más de 25 años de promedio que dura una instalación.
Los tejados urbanos aún no son un terreno muy trillado para el aprovechamiento de la energía solar fotovoltaica, pero se le augura un buen futuro, debido a la rentabilidad del negocio. Hasta el cambio de Real Decreto que tuvo lugar durante 2008, la mayor parte de las instalaciones fotovoltaicas se situaban en terrenos del campo, lo que fomentó una cierta especulación, como anteriormente había sucedido con la inmobiliaria. Para eliminar este problema, el Estado decidió cambiar la normativa y ahora fomenta en exclusiva las instalaciones fotovoltaicas sobre tejado. En principio los tejados industriales bien orientados son muy interesanes, porque disponen de mucho espacio y permiten la instalación de mucho peso. Pero ahora cada vez más inversores particulares se interesan sobre la posiblidad de utilizar tejados situados en las ciudades para cumplir esta labor. Si el tejado es de un edificio en propiedad, no existe ningún problema para utilizarlo. Si se comparte con más vecinos, se requiere el consenso de todos ellos para realizar la inversión y recoger los beneficios, que puede ingresarse durante los 25 años que garantiza el gobierno, aunque este tipo de instalaciones pueden durar hasta 40 años.
Este tipo de inversión en energía solar fotovoltaica para la venta de electricidad es especialmente interesante para particulares, gracias a su alta rentabilidad y seguridad, algo no muy común en las inversiones normales, de forma que es posible asegurarse un jugoso complemento a la jubilación que puede llegar a alcanzar el valor de un salario normal con la mínima inversión. Para las comunidades de vecinos, supone unos ingresos seguros que aseguran el confort de toda la comunidad.